El libro revisa los modelos de desarrollo implementados en El Salvador desde 1990.
Foto: Colproce.
San Salvador. El Colegio de Profesionales en Ciencias Económicas y la Universidad Francisco Gavidia presentaron el libro denominado “Hacia un nuevo modelo de desarrollo con igualdad de oportunidades para El Salvador”.
El libro ofrece un análisis sobre la evolución económica y social de El Salvador en las últimas tres décadas. Enfocado en la desigualdad estructural del país, según el autor Óscar Cabrera Melgar, quien plantea un diagnóstico de los modelos de desarrollo que han predominado y propone una alternativa basada en la equidad y la sostenibilidad.
El libro revisa los modelos de desarrollo implementados en El Salvador desde 1990, analizando su impacto en la distribución de la riqueza, la inversión pública y el acceso a derechos básicos.
En ese contexto describe el contexto del neoliberalismo radical y diversificación de exportaciones (1990-2009) que se caracteriza por una serie de reformas orientadas hacia el mercado, privatización de empresas estatales y la consolidación del sector financiero en manos de las élites.
Otro contexto es el neoliberalismo mitigado y transformaciones productivas sociales (2010-2019) que representa un intento de regulación del mercado con mayor protagonismo del Estado en inversión social, pero sin transformar la matriz económica heredada.
Por último el neoliberalismo radical y ruptura del Estado de Derecho (2020-2021) en el que se reintroducen reformas de mercado sin un programa claro de desarrollo, según Cabrera, quien no ve transformación productiva que genere crecimiento inclusivo.
Por ello Cabrera propone un sistema de protección social universal, transformación productiva y crecimiento inclusivo, seguridad ciudadana y cultura de paz, reformas en la justicia y erradicación de la violencia de género, participación ciudadana y transparencia, inclusión financiera y democratización del dinero, resiliencia ante el cambio climático y justicia fiscal.
El autor reconoce que la implementación de un nuevo modelo de desarrollo requiere una transformación estructural y un cambio en la cultura política y, para ello, propone iniciar un diálogo nacional con el objetivo de lograr un consenso en torno a una visión de país para 2050.