Queremos decirle al país que hemos conversado con los candidatos en vista de estos resultados tan cerrados con una tendencia irreversible. No damos resultados, cuando no son resultado, dijo la Presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena
y agregó que a los candidatos, a las organizaciones políticas, a los comandos, «queremos decirles que es el momento de ir a sus casas y transmitirles la tranquilidad a sus seguidores».
Vayan a sus hogares tranquila y pacíficamente, como siempre en la solidaridad que nos caracteriza como venezolanas y venezolanas, siguió diciendo durante su breve intervención.
Según Lucena, el país ha pasado por momentos difíciles y como siempre ha sabido sortear con tranquilidad esas dificultades y fortalecer, la democracia; Maduro sacó 250 mil votos de ventaja, lo que deja un resultado extremadamente cerrado.
Mientras tanto Nicolás Maduro, dijo que el sistema electoral de su país es “absolutamente confiable y transparente” y que con el dolor de la pérdida del comandante Hugo Chávez a cuestas, les hicieron una guerra económica desde diciembre, saboteos en los productos de primera necesidad, en la electricidad, señaló.
Colombianos con aparatos ultramodernos de espionaje, fueron capturados y los presentaremos mañana (lunes), como prueba de esta guerra, destacó Maduro.
“Respeto a los 7 millones de personas que votaron por él (Capriles), dijo Maduro al referirse a los que creyeron en el proyecto del opositor.
Maduro llamó a respetar los resultados y dijo que acepta con gusto que se haga una auditoría, aunque sabe que la ventaja es evidente con un 54 por ciento a su favor.
Al filo de la medianoche, en Venezuela, Capriles no aceptó los resultados y pidió que se revisen las cajas de los votos para verificar los resultados hasta que se cuente voto por voto.
«Yo no hago alianzas con la corrupción. Solo lo hago con Dios», dijo Capriles, al referirse a una insinuación de Maduro de que el opositor le habría hablado por teléfono para proponerle un pacto, debido a los resultados.
Capriles dice que un millón de personas que eran simpatizantes de Maduro, habrían votado por el candidato opositor. Aunque no reconoció los resultados, dijo que la diferencia solo son unos 200,000 votos. «Es así de chiquito», dijo Capriles, al tratar de minimizar los resultados, debido a que hubo más de 3 mil incidencias que ponen en entredicho el proceso electoral.
Dijo además, que el derrotado es el mismo gobierno.