Sectores como el textil y confecciones se han reinventado a través de la producción de insumos para la pandemia. “Somos el país que tuvo la productividad de colocar insumos médicos de calidad en el mundo, antes que otros países”.
Foto: Economía.
El ritmo de recuperación económica que El Salvador refleja luego de haber pasado por lo más fuerte de la pandemia, apunta a que el país podría cerrar este año con una inversión privada de más de $1,000 millones, destacó la ministra de Economía, María Luisa Hayem.
“Como Gobierno estamos en contacto con los inversionistas, y continúan con interés de retomar sus inversiones”, dijo la funcionaria.
Añadió que antes de la pandemia, estos empresarios habían mostrado interés en el país debido al posicionamiento alcanzado por la gestión del Presidente Nayib Bukele.
Ahora, luego de que la cantidad de contagios comenzó a descender, y con la reapertura de las economías a nivel mundial, los inversionistas han reafirmado su interés por hacer negocios en territorio salvadoreño, según las fuentes oficiales.
“Como Gobierno, estamos comprometidos, desde que el Presidente Nayib Bukele lanzó las 30 medidas económicas para paliar la caída (por la pandemia). Hemos trabajado para que la caída sea lo más baja posible”, aseguró la funcionaria.
Hayem destacó que el comportamiento de la economía salvadoreña refleja una recuperación a corto plazo del impacto ocasionado por la pandemia, contrario a lo que se había proyectado.
Las remesas, por ejemplo, hasta agosto de 2020, comparado con el mismo periodo del año anterior, solo han caído un 1.7 %, y los últimos cuatro meses han presentado una tendencia sostenida de crecimiento. “Esperamos llegar al nivel de 2019, o superarlo”, apuntó.
Un factor importante que ha permitido mantener el flujo de las remesas, es la disminución del desempleo hispano en Estados Unidos, el cual pasó de 19 % en abril, a 10.5 % en agosto.
Esto es de gran ayuda para la economía salvadoreña, debido a que las remesas representan más del 20 % del Producto Interno Bruto (PIB), dijo Hayem.
“Esto permite que las empresas sigan produciendo, y que el sector informal siga activo”, aseguró. Además, las exportaciones crecieron en un 58.3 % de junio a julio de 2020.