Gobierno brinda asistencia inmediata a familias de San Lorenzo y Ahuachapán afectadas por la actividad sísmica que ya contabiliza más de 200 sismos; además se ha declarado Alerta Roja en ambos municipios y Alerta Verde en el resto de municipios ahuachapanecos.
Fotos: DGPC.
Ahuachapán. Al menos 107 casas, la mayoría de adobe, han sido afectadas por los sismos que se generaron desde las 5:07 p.m. del pasado domingo en San Lorenzo, Ahuachapán. De esta cantidad entre 50 y 60 viviendas demandan prioridad por el tipo de daños.
Debido a esta situación, las autoridades de Protección Civil han declarado Alerta Roja en San Lorenzo y Ahuachapán y Alerta Verde en el resto de municipios ahuachapanecos.
Las zonas más afectadas son los cantones La Danta y Tahuapa; además, el caserío La Dantilla, Las Chinamas, El Aceituno, Calle Vieja y Las Morenas. Ya se han abierto tres albergues, uno de estos en el caserío Las Rocas, donde al momento se han refugiado 19 personas, (dos niños de 7 a 10 años; tres jóvenes, de 15 a 19; y 14 adultos, de entre 28 y 80 años)
Hasta las 8:00 a.m. de este lunes 16 de enero, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales ha verificado la ocurrencia de dos sismos de 5.1 y 5.3 de magnitud a las 5:07 p.m. y a las 10:47 p.m., respectivamente; 219 sismos más han registrado después de los dos eventos principales, de los cuales 60 han sido de magnitudes que oscilan entre 2.4 y 4.4.
Hasta el momento solo se conoce de algunas personas que recibieron golpes por objetos que cayeron, como tejas, pero no hay víctimas de gravedad, aunque el monitoreo continúa para constatar que no haya personas soterradas, dijeron las autoridades, pertinentes.
Los Equipos Tácticos Operativos de Protección Civil, el Cuerpo de Bomberos, el personal de la Dirección de Albergues del Ministerio de Gobernación, efectivos de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) y de la Policía Nacional Civil (PNC), entre otras instituciones, llegaron desde la noche del domingo en las zonas en las que se registran afectaciones para trasladar a las familias a zonas seguras. En vista de las condiciones climáticas, a las personas albergadas se les ha dotado de colchonetas y sábanas, además de alimentos.