América Latina presenta brotes de enfermedades como tos ferina, sarampión y poliomielitis, a raíz de las bajas coberturas vacunales en la región.
Foto: Sanfi.
Centroamérica. De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), América Latina ha sufrido una de las bajas en tasas de vacunación más graves en los últimos diez años.
Esta situación ha dejado a más de 67 millones menores de edad sin un esquema completo de vacunación, y lo más alarmante es que 48 millones de ellos no han recibido ni una sola dosis de vacunas esenciales. Hoy en día, los sistemas de salud ya comienzan a observar los resultados de este retroceso.
“Nos encontramos con retos muy similares respecto las barreras que nos han llevado al mismo resultado: niños y niñas sufriendo las consecuencias de enfermedades prevenibles por vacunación”, explica Rodrigo Restrepo, director ejecutivo de Medical IMPACT en Colombia.
Según datos de UNICEF, en 2021 la cobertura de la primera y tercera dosis de la vacuna contra difteria, tétanos y tosferina en las Américas alcanzó su nivel más bajo en 20 años, con 87% y 81% respectivamente.
En este contexto, la 23° Semana de Vacunación en las Américas (SVA), que se conmemoró del 26 de abril al 3 de mayo, adquiere especial relevancia. El llamado de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) es claro: frenar la caída en las tasas de vacunación y evitar el resurgimiento de enfermedades prevenibles.
En Costa Rica, al 12 de diciembre de 2024, se habían confirmado por laboratorio 113 casos de tosferina, tasa de 2,1 / 100.000 habitantes; en Honduras, al 22 de marzo de 2025 se registraron 13 casos de tosferina en San Pedro Sula; en Guatemala, en 2024 hubo 65 casos sospechosos y nueve positivos, en 2025, 13 casos sospechosos y seis positivos.
“En 2012 se reportaron más de 72.000 casos de tosferina a nivel mundial, y desde entonces se venía registrando una disminución progresiva, llegando a un mínimo de 3.293 casos en 2022 . Sin embargo, en 2024 se ha observado un repunte en varios países, entre ellos Brasil, México, Perú y Estados Unidos”, menciona la Dra. María Luis Ávila, Infectóloga pediatra, presidenta de SLIPE.
Agrega que “desde SLIPE recomendamos cuatro acciones fundamentales para mejorar las coberturas de vacunación: primero, fortalecer la comunicación intersectorial entre autoridades sanitarias, sociedades científicas y comunidades; segundo, implementar campañas educativas basadas en evidencia científica que combatan la desinformación; tercero, facilitar el acceso a la vacunación mediante estrategias innovadoras como unidades móviles y horarios extendidos; y cuarto, crear un ecosistema integral donde cada actor aporte desde su lugar para comunicar los beneficios de la inmunización y mejorar las tasas de cobertura mediante esfuerzos coordinados. ”
De acuerdo con los especialistas, estos brotes no son aislados. Existen muchos ejemplos en las Américas que resaltan los estragos del retraso en vacunación. En México, la secretaria de salud emitió un aviso epidemiológico a principios de marzo por el aumento de casos de tosferina, de los cuales durante cuatro meses de 2025 se han acumulado 696 casos, contra 60 reportados durante el mismo periodo en 2024.
En Colombia, el Ministerio de Salud ha reportado 495 casos notificados de tosferina en lo que va de 2025, de los cuales 69 han sido confirmados y 155 están en estudio, con tres fallecimientos registrados.
En Paraguay la Dirección General de Vigilancia de la Salud, en febrero de 2025, emitió una alerta epidemiológica por un aumento de casos con respecto a los años anteriores, siete casos en la semana epidemiológica 4 de 2025 (71% con esquemas incompletos para la edad) comparado con seis casos en todo el año 2024.
En Argentina, al 7 de abril del 2025, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se confirmaron 24 casos de tos ferina, comparado con 0 casos en el año 2024. (4)
Otras enfermedades como la poliomielitis, también se han hecho presentes en los últimos años, después de décadas de control y eliminación en la región. En 2022, Estados Unidos registró un caso en el estado de Nueva York y Perú notificó en marzo del mismo año un caso confirmado de polio. Ambos en pacientes no vacunados.
La disminución de coberturas no solo representa una amenaza para la salud individual de la niñez, sino que compromete la inmunidad colectiva.