El sector educativo en la mira de los ciberatacantes

ESET analiza por qué las instituciones académicas tienen una serie de características únicas que las hacen atractivas para los ciberatacantes y advierte cómo enfrentar estas amenazas.

Foto: ESET.

Centroamérica. Las instituciones educativas se transformaron en un objetivo popular para los ataques, debido a una combinación de redes porosas, gran número de usuarios, datos altamente monetizables y debido a sus conocimientos y presupuestos de seguridad limitados.

El equipo de investigación de ESET observó sofisticados grupos APT (Amenaza Persistente Avanzada) atacando instituciones en todo el mundo.

Los agentes patrocinados por estados-nación y los ciberdelincuentes se encuentran entre las mayores amenazas actuales para escuelas, institutos y universidades. En el período de abril a septiembre de 2024, el sector educativo estuvo entre las tres industrias más atacadas por grupos APT alineados con China, entre las dos primeras por Corea del Norte y entre las seis primeras por actores alineados con Irán y Rusia.

En el Reino Unido, el 71% de los centros de enseñanza secundaria y casi todas las universidades (97%) sufrieron un ataque o fallo de seguridad grave el año pasado, frente a solo la mitad (50%) de las empresas, según datos del Gobierno.

En Estados Unidos, las cifras más recientes disponibles del K12 Security Information Exchange (SIX) revelan que, entre 2016 y 2022, la nación experimentó más de un ciberincidente escolar por día.

En cuanto a las tácticas, técnicas y procedimientos utilizados para atacar instituciones del sector educativo, desde ESET aclaran que depende del objetivo final y del actor de la amenaza. En este sentido, ESET analiza los puntos que hacen atractivos a los establecimientos educativos para los ciberatacantes:  

Presupuesto y conocimientos limitados: El sector educativo suele estar bajo una mayor presión presupuestaria que las empresas privadas y suele estar más limitado para la contratación de talentos en ciberseguridad y a la adopción de herramientas de seguridad.

Uso de dispositivos personales sin seguridad adecuada: Según Microsoft, BYOD (Bring Your On Device) es muy común entre quienes estudian en instituciones estadounidenses. El uso de las redes escolares con los dispositivos personales puede proporcionar una vía de acceso a datos y sistemas sensibles si no se acompaña con una política de seguridad adecuada.

Bajo nivel de concientización de usuarios: El factor humano sigue siendo uno de los mayores retos para el personal de seguridad. El personal y quienes estudian en entornos educativos, son un objetivo buscado para el phishing, por lo que implementar programas de concientización es fundamental. Pero, por dar un ejemplo, solo el 5% de las universidades del Reino Unido, realiza este tipo de actividades destinadas a estudiantes.

Cultura de intercambio de información y colaboración externa: La cultura de intercambio de información y de apertura a la colaboración externa suele acrecentar los riesgos. Se hace necesario un control estricto, especialmente en las comunicaciones por correo electrónico, y esto puede volverse difícil cuando hay tantas terceras partes conectadas, desde antiguos alumnos y donantes hasta organizaciones benéficas y proveedores.

Una amplia superficie de ataque: La superficie de ciberataques se amplió con la llegada del aprendizaje virtual y el trabajo a distancia. Desde los servidores en la nube hasta los dispositivos móviles personales, hasta las redes domésticas y el gran número de empleados y estudiantes, hay muchos objetivos a los que pueden apuntar las amenazas.

Grandes cantidades de información personal identificable: Las escuelas y universidades almacenan, gestionan y procesan grandes volúmenes de información personal identificable (IPI) sobre el personal y estudiantes, incluidos datos sanitarios y financieros. Esto las convierte en un objetivo atractivo para los estafadores y los autores de ransomware con motivaciones económicas. Además, muchas instituciones llevan adelante investigaciones sensibles que también las convierte en objetivo de los estados-nación.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *