Medios hondureños indican que el deportado participó en hechos de corrupción mencionados en el denominado “Caso Pandora”, mediante el cual se conoció que un entramado de corrupción desvió 282 millones de lempiras.
Foto: PNC.
La Unión. Josué Suárez Ramírez, un ciudadano hondureño reclamado por la justicia de su país, ha sido deportado desde El Salvador hacia Honduras el pasado martes, anunció el ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro.
Suárez Ramírez es acusado de malversación de fondos públicos, delito que fue cometido cuando éste era el apoderado legal y representante legal de las fundaciones «Dibattista» y «Todos Somos Honduras».
El prófugo fue detenido por las autoridades salvadoreñas en 2022, en el Aeropuerto Internacional Monseñor Oscar Arnulfo Romero, luego que este tratara de refugiarse en El Salvador, para evitar ser procesado en Honduras por los delitos de Lavado de activos, Prevaricato, Malversación de caudales públicos, Fraude y Uso de documentos públicos falsos.
Medios hondureños indican que el deportado participó en hechos de corrupción mencionados en el denominado “Caso Pandora”, mediante el cual se conoció que un entramado de corrupción desvió 282 millones de lempiras, por lo cual, al conocerse su detención en El Salvador, la justicia hondureña solicitó su extradición en agosto de 2023.
Todos estos delitos ocurrieron entre los años 2010 y 2013, según la información de las autoridades hondureñas, según refirió el ministro salvadoreño.
En concreto, Suárez Ramírez realizó operaciones no autorizadas y desvío de fondos de la Secretaria de Estado de los despachos de Agricultura y Ganadería, además, utilizó fondos para fines personales.
Solo Suárez Ramírez se habría apropiado de 55 millones de lempiras, mismos que iban destinados a programas en favor de campesinos y agricultores. La entrega del imputado ocurrió en el paso fronterizo El Amatillo, distrito de La Unión.