La defensa apelará la decisión del juzgado de Paz que dictó prisión contra el exgobernante ante una Cámara de lo Penal, como un intento de lograr la libertad de las personas acusadas.
Foto: Wikimapia/Periódico Equilibrium.
El Juzgado Cuarto de Paz de San Salvador resolvió, en la audiencia inicial, dictar la detención provisional en contra de los siete detenidos por sospechas de ser responsables de actos de corrupción en las más altas esferas del Estado, entre ellos el expresidente Elías Antonio Saca.
Junto a él fueron enviados a prisión los exsecretarios de Juventud, César Funes, de Comunicaciones, Julio Rank y Privado de la Presidencia Elmer Charlaix, además de tres funcionarios del actual gobierno.
Estos últimos también fueron parte del gabinete de Saca y ahora son acusados de los delitos de asociaciones ilícitas, lavado de dinero y casos especiales de lavado de dinero.
La acusación fiscal sostiene que Saca y las otras seis personas detenidas, desviaron $246 millones, parte de los cuales habrían sido lavados. Por ello las cuentas y los bienes de los imputados han sido congelados por decisión judicial, a petición de la parte acusadora.
Silvia de Bonilla y las demás personas que actúan en defensa de quienes son procesados, ha mostrado su desacuerdo porque a su juicio todas las personas tienen suficiente arraigo para estar procesadas en libertad.
El domingo, la citada defensora hizo pública una carta enviada al Jefe de la DAN, Francisco Gómez, agradeciéndole por el “trato digno, generoso, humano y garantista” que se ha dado a las personas detenidas quienes están confinadas en bartolinas de la División Antinarcóticos de la PNC.
También ese mismo día, Guillermo Gallegos, uno de los líderes de GANA, expresó su solidaridad con el expresidente Saca, porque, en sus propias palabras, “no podemos apoyarle en nada más”.