El veredicto: culpable

condeanda

Cindy Aracely Erazo Aguilar y su defensor intentaron sembrar una duda y cambiar así las circunstancias que rodeaban la muerte del bebé de la mujer, a quien ella asfixió en un baño de un centro comercial de Soyapango.

Foto: Periódico Equilibrium.

Los intentos por salvar de la cárcel a la joven Cindy Aracely Erazo Aguilar no dieron los resultados esperados y el Tribunal Primero de Sentencia de San Salvador no tuvo más que condenarla a 30 años de cárcel.

La Fiscalía siempre sostuvo el homicidio premeditado de la mujer porque dice que le introdujo papel higiénico en su boca segundos después de darlo a luz en el baño de un centro comercial de Soyapango.

La defensa plateó otra teoría: que la joven madre dio a luz en el baño, pero que el bebé cayó en el inodoro y se ahogo, por eso quería que la condenaran por homicidio culposo una figura que, incluso, podría haberla salvador de la prisión.

No funcionó. El bebé no tenía agua en sus pulmones y el peritaje forense determinó que el recién nacido había respirado al nacer.

Un grupo feminista, cuya representante fue entrevistada por un canal local de televisión, se pronunció en contra de la condena de esta mujer.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *